Las cerveza rubia es el prototipo de cerveza por excelencia, pero existen muchos tipos muy diferentes, cada uno de ellos elaborados de una manera distinta o con una historia diferente detrás.
Cerveza elaborada con un agua de Font del Regás del Parque Natural del Montseny, increíblemente pura, maltas Pale Ale, Carahell y Crystall, y lúpulos Centennial y Amarillo. De color anaranjado y turbia como corresponde a una cerveza artesana. De espuma blanca, no excesivamente abundante. Con aromas intensos a lúpulo, con notas cítricas y a caramelo que en cierto modo lo equilibran. De gusto muy amargo, y largo e intenso retrogusto. Recuerdos de pino, resina, toques florales, naranja y cítricos.
Predomina la intensidad aromática y sabores característicos de los lúpulos utilizados. Poderosas notas cítricas, presencia de lima y retrogusto a pino y resina. A esta cerveza le acompaña una espuma abundante, fina y cremosa. Hopping con lúpulos Citra y Amarillo: adición extra de lúpulo en frío, directamente en el fermentador.
Maltas de cebada y trigo, levadura alemana de estirpe y lúpulo Simcoe en dry-hopping. Papaya y néctar tropical con toques de plátano y pimienta. Una golosina líquida con un paso por boca espectacular..
Destaca por su aroma afrutado cítrico y floral proveniente de los lúpulos Cascade y Mosaic. Cuenta con un agradable amargor moderado que predomina por encima del sabor a malta. Transmite una sensación en boca amarga, con un cuerpo medio en el que destacan los lúpulos empleados. Premiada con Bronce en la Dublin Craft Beer Cup de 2016 y mejor IPA de España en los World Awards de Londres en 2019.